Viernes, septiembre 27, 2019
Weltanschauung de las emociones
Pedro Rafael Castro
Definiciones de cosmovision.veritasfidei.org
La palabra cosmovisión
quiere decir visión del mundo, esto es, la perspectiva, concepto o
representación mental que una determinada cultura o persona se forma de la
realidad. Por lo tanto, una cosmovisión ofrece un marco de referencia para
interpretar la realidad, el cual contiene creencias, perspectivas, nociones,
imágenes y conceptos.
Tiene su origen en la
traducción literal de la palabra alemana Weltanschauung, formada a
su vez de la palabra Welt, que quiere decir ‘mundo’, y anschauen,
que quiere decir ‘mirar’ u 'observar'. En su traducción, toma del griego la
palabra cosmos que quiere decir ‘mundo’ o ‘universo’, y del
latín la palabra visio.
La representación del
mundo responde al contexto particular en el cual se insertan las personas. En
consecuencia, una determinada cosmovisión ò persovisión responde a un
tiempo-espacio específico.
Las emociones son
reacciones psicofisiológicas que representan modos de adaptación a ciertos
estímulos del individuo cuando percibe un objeto, persona, lugar, suceso o
recuerdo importante. Los diversos estados emocionales son causados por la
liberación de neurotransmisores u hormonas, que luego convierten estas
emociones en sentimientos y finalmente en el lenguaje. Conductualmente, las
emociones sirven para establecer nuestra posición con respecto a nuestro
entorno, y nos impulsan hacia ciertas personas, objetos, acciones, ideas y nos
alejan de otros. Las emociones actúan también como depósito de influencias
innatas y aprendidas y es allí donde donde comienza la conexión con las
cosmovisiones y las persovisiones.
Este número está
destinado a indagar inicialmente sobre la relación entre las cosmovisiones, las
emociones, la neurociencias y educación. Se trata de avanzar en la mirada que
desde la investigación se ha venido haciendo en torno del cerebro y sus
misterios. El descubrimiento de la mielina, como el proceso clave y esencial de
las bases biológicas del aprendizaje, al tiempo que elimina mucho de los mitos
y “extrañas” interpretaciones sobre qué es aprender del pasado, nos abre la
puerta a la esperanza de ser más asertivos y sobre todo más eficientes en una
tarea que hay que rescatar: la del maestro formador del milenio.
Pedro Rafael Castro
Publicado por Pedro Rafael Castro en 10:12 pm